Nuestra visita al románico andorrano empezará por la zona sur, la de entrada al país pirenaico cuando se viene de la Seu d'Urgell. Llegaremos hasta Sant Julià de Lòria para, nada más llegar al núcleo urbano, coger un desvio a la izquierda que nos llevará a Fontaneda. La carretera salva un fuerte desnivel en pocos quilómetros y en unos minutos nos permite obtener amplias y vistosas panorámicas del pirineo andorrano (foto 1). El caserío de Fontaneda se encuentra a la derecha de la carretera, y accederemos a él (foto 2) por un desvío de apenas unos 300 metros. La Iglesia de Sant Miquel está en lo alto, dominando una excelente vista del valle (fotos 3/4). Regresaremos a Sant Julià de Lòria en cuyo centro urbano, al lado de la antigua carretera que llevaba a Andorra la Vella, se levanta el templo de Sant Julià y Sant Germà. De la antigua construcción románica sólo queda el campanario (foto 5). Nuestra ruta terminará en Nagol, villa a medio camino en la carretera que asciende hasta Certers. Allí visitaremos la iglesia de Sant Serni (fotos 6/7) y la cercana ermita de Sant Martí, a la que se accede tras un paseo de una media hora por un sendero bien indicado que sale unos metros más abajo de la carretera, en el recodo anterior al de Sant Serni. |